EL CONSEJO GENERAL SOLICITA QUE EL ACCESO A LA INSPECCIÓN SEA DESDE PEDAGOGÍA

El Consejo general ha solicitado al Ministerio de Educación y Formación Profesional que el acceso al cuerpo de inspección sea a través del título de pedagogía o psicopedagogía complementado con un máster de especialización. La inspección educativa es una pieza clave para el éxito de cualquier sistema educativo y debe ser profesionalizada.

Este es el documento que el Consejo general ha remitido al Ministerio:

Subdirección General de Centros, Inspección y Programas

 

 

 

APORTACIONES AL PROYECTO DE REAL DECRETO POR EL QUE SE REGULA LA INSPECCIÓN EDUCATIVA

 

 

 

1.- CONTEXTUALIZACIÓN

 

 

Históricamente queda constatado que la Pedagogía nacida como arte, o conjunto de reglas y/o técnicas requeridas para realizar el oficio de enseñar, se constituye como ciencia, o el compendio de principios fundamentales generales que sustentan y legitiman una determinada actividad teórico-práctica, para configurarse como una profesión educativa, oficialmente reconocida. Arte, ciencia y profesión, en suma, constituyen los tres nutrientes que integran la concepción identitaria de la pedagogía actual, mirada desde su construcción genealógica. Así pues, alcanzado el estatus científico (Herbart y su Pedagogía General derivada del fin de la educación de 1806), la Pedagogía nace ligada al “arte y oficio de enseñar”, encuentra su hábitat natural en las Escuelas Normales de Formación del Magisterio.

En el contexto español, desde la creación del Museo Pedagógico Nacional (1882), y la Escuela de Estudios Superiores del Magisterio (1911), un centro docente y de investigación dirigido a la formación de los profesores de Escuelas Normales e Inspectores de Primera Enseñanza, la ciencia pedagógica ha sido siempre el referente para la capacitación de la función directiva y de inspección de los centros docentes. Las secciones de Pedagogía de las Facultades de Filosofía y Letras recogerán el testigo, sumando la responsabilidad de la formación de los directores de escuelas graduadas. La Licenciatura en Pedagogía, por tanto, habilitaba para el acceso a los mencionados cuerpos educativos de la administración pública.

La Ley de Educación General de 1970, que por otra parte supuso un empuje modernizador del sistema educativo español, cambio la perspectiva anterior: la formación del profesorado de secundaria fue entregada a los recién creados Institutos de Ciencias de la Educación (ICEs) y, pese a que la Licenciatura de Pedagogía mantuvo sus especialidades de Organización escolar, Orientación y Educación Especial, la Pedagogía entró en un proceso desprofesionalizador y la dirección de centros docentes y la inspección educativa pasó a manos de la carrera del Magisterio, priorizando el meritaje que no la capacitación pedagógica para el ejercicio de tales funciones. En este caso, solo los estudiantes del segundo ciclo de Pedagogía, provenientes del Magisterio, tenían acceso a los cuerpos directivos de nuestro sistema educativo.

Afortunadamente, en la actualidad, la reforma de los estudios universitarios provocada por el Proceso de Bolonia (1999), con una nueva arquitectura de titulaciones, ha rectificado parte de la situación mencionada, volviendo a los orígenes: la formación del profesorado de secundaria regresa a la capacitación de las Facultades de Educación, a través del Máster de Profesorado de Secundaria. Y esta debe ser la orientación a seguir, en cuanto a las otras dos ocupaciones, directores de centro e inspectores de enseñanza primaria, si se quiere mantener una cierta racionalización y homologación de los estudios superiores como preconiza la Reforma de Bolonia.

Por ello, la intención expresada por el Ministerio de Educación y Formación Profesional de replantear la formación del colectivo de inspectores nos parece una oportunidad privilegiada para volver a dotar a los gestores y administradores del sistema de la capacitación pedagógica necesaria para el ejercicio de sus funciones profesionales, en el marco de la calidad que exige una sociedad democrática.

No debemos olvidar, que la actual normativa, tanto nacional como autonómica, diseña un conjunto de competencias (contenidos, habilidades y actitudes) que están perfectamente recogidas en el Plan de Estudios del Grado de Pedagogía, al menos en su nivel más básico, que Bolonia establece para los títulos de Grado.

Por todo ello, abogamos por la necesidad de una capacitación pedagógica para el cuerpo de inspectores, centrada en el Grado de Pedagogía y completada con un Máster sobre Administración y Organización Escolar. Así, “La evaluación del sistema, la participación en la difusión de las mejores prácticas comparadas, propiciar la autonomía de los centros y su rendición de cuentas, deben ser ejes relevantes para la mejora en las prácticas de enseñanza, en los aprendizajes del alumnado, en la gestión de los centros y en su toma de decisiones”, como expresa el conjunto de normativas vigentes, quedarían claramente cubiertas con la formación planteada y, además, nos situaríamos en el contexto de buena parte de los países europeos de nuestro entorno.

          Y todo lo aportado es consecuencia de la enorme complejidad del sistema educativo ha ido desarrollando a lo largo de los últimos años. Así, desde las diferentes agrupaciones de inspectores, tanto a nivel nacional como autonómica, se reclama una mayor capacidad de gestión pedagógica a los centros, traducida en colaboración y participación con los centros en su mejora diaria e ir abandonando una simple figura supervisora e incluso sancionadora. Para ello, la formación pedagógica resulta ya no solo necesaria, sino se antoja obligatoria. Y creemos que esta formación pedagógica debe ser de base, con su especialización, tal y como se ha expuesto anteriormente, pero partiendo de un grado específico.

 

2.- SOLICITAMOS

 

  1. Profesionalizar el acceso a la inspección educativa mediante el grado de pedagogía y un máster profesionalizante ad hoc desde las facultades de educación.
  2. Se incorpore al texto normativo el acceso al cuerpo de inspectores:
    1. La titulación de acceso al cuerpo de inspectores será el grado de pedagogía, licenciatura en pedagogía, licenciatura en psicopedagogía y las anteriores denominaciones, Licenciatura en filosofía y letras subsección pedagogía, licenciatura en filosofía y ciencias de la educación, licenciatura en ciencias de la educación y licenciatura en psicopedagogía”
    2. Haber cursado un máster profesionalizante”

           

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Un comentario

  1. JUAN MIGUEL ALBERTOS GARCÍA dice:

    Buenas tardes,
    A vuestra atención.
    A) Estoy de acuerdo con la Profesionalización de la Inspección. Pero no puede ser que un Maestro sea Inspector de un CIFP, como tampo puede ser que un Ingeniero Industrial sea Inspector de un CEIP.
    B) No se debe de excluir al resto de titualciones Univesitarias Superiores para acceder a la Inspección Educativa. Inspección Educativa que adolece de Inspectores con la condición de Licenciados en Derecho y con años de experiencia forense.
    Un saludo, Juan Miguel Albertos García Profesor de FOL en Canarias. Licenciado en Derecho por la UNED, con dos Máster de Grado (UNED y UCJC)

    octubre 29, 2022
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